Extremadura

Extremadura posee un valioso patrimonio gastronómico respaldado por figuras de calidad como la Denominación de Origen Protegida (DOP), la Indicación Geográfica Protegida (IGP) y la Especialidad Tradicional Garantizada (ETG), que garantizan la autenticidad, el origen y la excelencia de sus productos.

Las DOP extremeñas protegen productos elaborados íntegramente en su territorio, reflejando la riqueza natural y la tradición agroalimentaria de la región. Destacan el Jamón de Jabugo, el Queso de La Serena o los Aceites de Monterrubio y Gata-Hurdes, ejemplos de calidad y sabor reconocidos nacional e internacionalmente.

Las IGP, por su parte, reconocen productos cuya reputación y características dependen de su origen, aunque no todas las fases de su elaboración se realicen en la zona. Ejemplos son el Cordero de Extremadura o la Ternera de Extremadura, auténticos símbolos del paisaje y la cultura alimentaria extremeña.

Las ETG protegen especialidades tradicionales que mantienen métodos de producción y recetas históricos, preservando la identidad culinaria de Extremadura.

Gracias a estas figuras de calidad, los productos extremeños son auténticos embajadores de su gastronomía, ofreciendo un equilibrio perfecto entre tradición, territorio y excelencia enogastronómica.